Mateo 5; 43 – 48

Dijo JESÚS a sus Discípulos: “Han oído ustedes que se dijo: Ama a tu prójimo o odia a tu enemigo. YO, en cambio, les digo: Amen a sus enemigos, hagan el bien a los que los odian y rueguen por los que los persiguen y los calumnian, para que sean hijos del PADRE Celestial. Que hace salir el sol para buenos y malos, y mando su lluvia sobre los justos y los injustos.

Porque si ustedes aman a quienes los aman, ¿Qué recompensa merecen? ¿No hacen lo mismos los publicanos? Y si saludan tan solo a sus hermanos, ¿Qué hacen de extraordinario? ¿no hacen eso mismo los paganos? Sean, pues, perfectos como su PADRE Celestial que es Perfecto”.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

Mateo 5; 20 – 26

Dijo JESÍUS a sus Discípulos: “Les aseguro que si su justicia no es mayor a la de los escribas y los Fariseos, ciertamente no entrarán ustedes en el Reino de los Cielos. Han oído que se dijo a sus padres: No matarás y el que mate será llevado ante un tribunal. Pero YO les digo: Todo el que se enoje con su hermano, será llevado también ante el tribunal; el que insulte a su hermano, será llevado ante el tribunal supremo, y el que lo desprecie, será llevado al fuego del castigo.

Por lo tanto, si cuando vas a poner tu ofrenda en el altar, te acuerdas allí mismo que tu hermano tiene una queja contra ti, deja tu ofrenda junto al altar y ve primero a reconciliarte con tu hermano, y vuelve  luego a presentar tu ofrenda.

Arréglate pronto con tu adversario, mientras vas con él por el camino, no sea que al llegar te entregue al juez, y el juez al carcelero, y te metan a la cárcel. Te aseguro que no saldrás de allí hasta que hayas pagado hasta el último centavo”.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

Mateo 7; 7 – 12

Dijo JESÚS a sus Discípulos: “Pidan y se les dará; busquen y encontrarán; llamen y se les abrirá. Porque todo el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y el que llama, le abren. ¿Hay acaso entre ustedes alguno que le dé una piedra a su hijo, cuando le pide pan? Y si le pide pescado, ¿le da una serpiente? Si ustedes, a pesar de ser malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, con cuánta mayor razón el PADRE, que esta en los cielos, dará cosas buenas a quienes se lo pidan. Traten a los demás como quieren que ellos los traten a ustedes. En esto se resume la ley de los profetas”.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

Lucas 11; 29 – 32

La multitud se apiñaba alrededor de JESÚS y este les comenzó a decir: “La gente de este tiempo es gente perversa. Pide una señal, pero no se les dará más que la señal de Jonás. Pues así como Jonás fue señal para los habitantes de Nínive, lo mismo será el Hijo del Hombre para la gente de este tiempo. Cuando sean juzgados los hombres de este tiempo, la reina del sur se levantara en el día del juicio para condenarlos, porque ella vino de los últimos rincones de la tierra para escuchar la sabiduría de Salomón, y aquí hay uno que es mas que Salomón. Cuando sea juzgada la gente de este tiempo, los hombres de Nínive se levantarán el día del juicio para condenarla, porque ellos se convirtieron con la predicación de Jonás, y aquí hay uno que es mas que Jonás”.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

Mateo 6; 7 – 15

Dijo JESÚS a sus Discípulos: “Cuando ustedes hagan oración no hablen mucho, como los paganos, que se imaginan que a fuerza de tanto hablar, serán escuchados. No los imiten, porque el PADRE sabe lo que les hace falta, antes que se lo pidan. Ustedes pues oren así: PADRE nuestro, que estas en el cielo, santificado sea tu nombre, venga tu Reino, hágase tú voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caen en tentación y líbranos del mal.

Si ustedes perdonan las faltas de los hombres, también a ustedes los perdonará el PADRE que esta en los cielos. Pero si ustedes no perdonan a los hombres, tampoco el PADRE los perdonará a ustedes sus faltas”.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

Mateo 16; 13 – 19

Cuando llegó JESÚS a la región de Cesarea de Filipo, hizo esta pregunta a sus Discípulos: “¿Qué dice la gente que es el Hijo del Hombre?” Ellos respondieron: Unos dicen que eres Juan el Bautista; otros, que Elías; otros, que Jeremías o algunos de los profetas.

Luego les preguntó: “Y ustedes, ¿Quién dicen que soy YO?” Simón Pedro tomó la palabra y le dijo: Tú, eres el Mesías, el Hijo del DIOS vivo. JESÚS le dijo entonces: “¡Dichoso tú, Simón, hijo de Juan, porque esto no te lo ha revelado ningún hombre, sino mi PADRE, que esta en los cielos! Y YO te digo a ti que eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia. Los poderes del infierno no prevalecerán sobre ella. YO te daré la llave del Reino de los Cielos, y todo lo que ates en la tierra, quedara atado en el cielo. Y todo lo que desates en la tierra, quedará desatado en el cielo”.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

 

Marcos 1; 12 – 15

El Espíritu impulsó a JESÚS a retirarse al desierto, donde permaneció durante cuarenta días y fue tentado por satanás. Vivió allí entre animales salvajes, y los ángeles le servían.

Después que arrestaron a Juan el Bautista, JESÚS fue a Galilea para predicar el Evangelio de DIOS y decía: “Se ha cumplido el tiempo y el Reino de DIOS esta cerca. Conviértanse y crean en la Palabra”.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

Lucas 5; 27 – 32

JESÚS vio a un publicano, llamado Leví (Mateo), sentado en su mesa de recaudador de impuestos, y le dijo: “Sígueme”. Él dejó todo, se levantó y lo siguió. Levó ofreció en su casa un gran banquete en honor a JESÚS, y estaban a la mesa, con ellos, un gran número de publicanos y otras personas. Los Fariseos y los Escribas criticaban por eso a los Discípulos, diciéndoles: ¿Por qué comen con publicanos y pecadores? JESÚS les respondió: “No son los sanos los que necesitan al médico, sino los enfermos. No he venido a llamar a los Justos, sino a los pecadores, para que se conviertan”.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

Mateo 9; 14 – 15

Los Discípulos de Juan fueron a ver a JESÚS y le preguntaron: ¿Por qué tus Discípulos no ayunan, mientras que nosotros y los fariseos si ayunamos? JESÚS les respondió: “¿Cómo pueden llevar luto los amigos del esposo, mientras él está con ellos? Pero ya vendrán días en que le quitarán al esposo, y entonces ayunarán”.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

Lucas 9; 22 – 25

Dijo JESÚS sus Discípulos: “Es necesario que el Hijo del Hombre sufra mucho, que sea rechazado por los ancianos, los sumos sacerdotes y los escribas, que se entregado a la muerte y que resucite al tercer día”. Luego dirigiéndose a la multitud, les dijo: “Si algunos quiere acompañarme, que no se busque a si mismo, que tome su cruz de cada día y me siga. Porque el que quiera conservar su vida la perderá; pero, el que pierda su vida por mi causa, ése tendrá vida eterna. En efecto, ¿De que le sirve a un hombre ganar el mundo entero, si se pierde a sí mismo o se destruye?”.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

Mateo 6; 1 – 6 / 16 – 18

JESÚS dijo a sus Discípulos: “Tengan cuidado de no practicar sus obras de piedad delante de los hombres para                 que los vean. De lo contrario, no tienen recompensa con su PADRE celestial. Port lo tanto cuando des limosna, no lo anuncies con trompeta, como lo hacen los hipócritas en las plazas y las sinagogas, para que los alaben los hombres. YO les aseguro que ya recibieron su recompensa. Tú en cambio, cuando des limosna, que no sepa tu mano izquierda lo que hace tu mano derecha. El PADRE que ve en lo secreto te recompensará. Cuando ustedes hagan oración no hagan como los hipócritas, que les gusta orar de pie en las sinagogas y las esquinas de las plazas, para que toda la gente los vea. Les aseguro que ya tiene su recompensa. Tú en cambio, entra en tu cuarto, cierra la puerta, ora ante tu PADRE, que esta ahí, en lo secreto; y tu PADRE que ve en lo secreto, te recompensará. Cuando ayunes, no pongas la  cara triste, lo hacen  los hipócritas, que descuidan la apariencia de su rostro, para que la  gente note que están ayunando. YO les aseguro que ya recibieron su recompensa. Tú en cambio cuando  ayunes, no pongas cara triste, perfúmate la cabeza, lávate la  cara; que no sepa la gente que estas ayunando, sino tu PADRE, que esta en lo secreto, que ve en lo secreto, ter recompensará”.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

Marcos 8; 14 – 21

Cuando iban los Discípulos en la barca con JESÚS, se dieron cuenta que se les había olvidado de llevar pan; solo tenían uno. JESÚS les hizo esta advertencia: “Fíjense bien y cuídense de la levadura de los Fariseos y de la Herodes”. Ellos comentaban entre sí: Es que no tenemos panes. Dándose cuenta de ello, les dijo: “¿Por qué están comentando que no trajeron panes? ¿Todavía no entienden ni acaban de comprender? ¿tan embotada esta su mente? ¿Para que tienes todavía ustedes ojos, si no ven, y oído, si no oyen? ¿No recuerdan cuantos canastos de sobra recogieron, cuando repartí cinco panes entre cinco mil hombres?”. Ellos le contestaron: Doce. Y añadió: “¿Y cuantos canastos de sobras recogieron cuando repartí siete panes entre cuatro mil?”. Le respondieron: Siete. Entonces ÉL dijo: “¿Y todavía no acaban de comprender?”

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

Marcos 8; 11 – 13

Se acercaron a JESUS los Fariseos y se pusieron a discutir con ÉL, y para ponerlo a prueba, le pedían una señal del cielo. JESÚS suspiro profundamente y dijo: “¿Por qué esta gente busca una señal? Les aseguro que a  este gente no se les dará ninguna señal”. Entonces los dejo, se embarco y se fue a la otra orilla.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR.

 

Marcos 1; 40 – 45

Se le acercó a JESÚS un leproso suplicándole de rodillas: Si tú quieres, puedes curarme. JESÚS se compadeció del él, y extendiendo la mano, lo tocó y le dijo: “¡Si quiero, sana! ” inmediatamente se le quito la lepra y quedo sano. Al despedirlo, JESÚS le mandó con severidad: “No se lo cuentes a nadie, pero para que conste, ve a presentarte al sacerdote y ofrece por tu purificación lo que mandó Moisés”. Pero aquel hombre comenzó a divulgar el tanto lo sucedido, que JESÚS ya no podía entrar abiertamente en la ciudad, sino que se quedaba afuera, en lugares solitarios, a donde acudían a ÉL de todas partes.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

Marcos 8; 1 – 10

JESÚS vio que lo seguía mucha gente y no tenía para comer. Llamó a sus Discípulos y les dijo: “Me lastima esta  gente, ya llevan tres días conmigo y no tiene que comer. Si los mando a sus casas en ayunas, se van a desmayar en el camino. Además algunos han venido de muy lejos”. Los Discípulos le respondieron: ¿Y dónde se puede conseguir pan, aquí esta despoblado para que coma esta  gente? ÉL les preguntó: “¿Cuántos panes tienen?” ellos respondieron: Siete. Mando que se sentaran en el suelo, tomo los panes, dio gracias, los partió  y se los dio a los Discípulos, para que  los distribuyeran. Además tenían cuatro pescados, JESÚS los bendijo y los dio para que los repartieran. La gente comió hasta quedar satisfecha, y todavía recogieron siete canastos de sobras. Eran unos custro mil. JESÚS los despidió y luego se embarcó con sus Discípulos y llegaron a la región de Dalmanuta.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

 

 

Marcos 7; 31 – 37

Salió JESÚS de la región de Tiró, pasó por Sidón, al mar de Galilea, atravesando la región de la Decápolis. Le llevaron entonces un hombre sordo y tartamudo, le suplicaron que le impusiera las manos. ÉL lo aparto a un lado de la gente, le metió los dedo en los oídos y le tocó la lengua con saliva. Después, mirando al cielo, suspiró y le dijo: “!Effeta¡” (Que significa: ábrete) al momento se le abrieron los oídos, se le soltó la lengua y comenzó a hablar sin dificultad. ÉL les mandó que no dijeran nada a nadie, pero cuanto mas se lo mandaba, , ellos con más insistencia  lo proclamaban; todos estaban asombrados y decían: ¡Que bien lo  hace todo¡ hace oír a los sordos y hablar a los mudos.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

Marcos 7; 24 – 30

JESÚS salió de Genesaret y se fue a la región donde esta Tiró. Entro en una casa, pues no quería que nadie se enteraba de que estaba allí, pero no pudo pasar inadvertido. Una mujer, que tenía una niña poseída por un espíritu impuro, se enteró, fue a buscarlo y se postró a sus pies. Una mujer de Siria Fenicia y pagana, le rogo a JESÚS que sacara el demonio de su hija, ÉL le respondió: “Deja que coman primero los hijos, no esta bien quitarles el pan a los hijos para echárselos a los perros”. La mujer le replico: Sí, SEÑOR, pero, también es cierto que los perro comen de las migajas que caen de la meza de los hijos. JESÚS le contesto: “Anda, vete; por eso que has dicho, el demonio ha salido de tu hija”. Al llegar a su casa, encontró a su hija acostada en la cama y totalmente sana.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

Marcos 7; 14 – 23

JESÑUS llamo la gente y les dijo: “Escuchen todos y entiéndanme. Nada que entre de afuera puede manchar al hombre, lo que sí lo mancha es lo que sale de adentro”. Cuando entro en una casa para alejarse de la muchedumbre, los Discípulos le preguntaron que quería decir aquella parábola. ÉL les contesto: “¿Ustedes también son capaces de comprender? ¿no entienden que nada que entre al hombre de afuera puede contaminarlo, porque no entra en su corazón; sino en el vientre, y sale del cuerpo?”. Con estas palabras declaraba limpios a todos los alimentos. Luego agregó: “LO que mancha al hombre es lo que sale de adentro, porque del corazón del hombre salen las intenciones malas, la fornicación, el fraude, el desenfreno, la envidia, la difamación, el orgullo y la frivolidad. Todas etas maldades salen de dentro y manchan al hombre”.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

Marcos 7; 1 – 13

Vinieron de Jerusalén algunos escribas y maestro de la ley a ver a JESÚS, y al ver que sus Discípulos comían con las manos impuras (Sin lavárselas), le preguntaron: ¿Por qué tus Discípulos comen las manos impuras y no siguen las tradiciones de nuestros mayores?

JESÚS les contesto: “¡Que bien profetizó Isaías con ustedes!, Hipócritas, cuando escribió: Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón esta lejos de mi. Es inútil el culto que me rinden, porque enseñan doctrinas que no son preceptos humanos. Ustedes dejan de lado el mandamiento de DIOS, para aferrarse a las tradiciones de los hombres”. Después añadió: “De veras son muy hábiles ustedes para violar el mandamiento de DIOS y conservar su tradición. Porque Moisés dijo: Si uno dice a su madre o a su padre: NO te puedo ayudar porque doy mi ofrenda al Templo, y no me queda nada. Así anulan la palabra de DIOS con esa tradición que han transmitido. Y hacen muchas cosas semejantes a esa ”.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

Marcos 6; 53 – 56

JESÚS y sus Discípulos terminaron la travesía del lago y tocaron tierra en Genesaret. Apenas bajaron de la barca, la gente lo reconoció y de toda aquella región acudían a ÉL. A cualquier parte que sabían que se encontraba, y le llevaban en camilla a los enfermos. A donde quiera que llegaba, en los poblados, o ciudades y caseríos, la gente le ponías a sus enfermos en la calle y le rogaban que por lo menos los dejara tocar la punta de su manto, y cuantos lo tocaban, quedaban curados.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR JESÚS.

 

Marcos 5; 30 – 34

Los Discípulos volvieron con JESÚS y le contaron todo lo que habían hecho y enseñado. Entonces ÉL les dijo: “Venga conmigo a un lugar solitario, para descansar un poco”. Porque eran tantos los que iban  y venían, que no les dejaban tiempo ni para comer. JESÚS y sus Discípulos se dirigieron en una barca a un lugar apartado y tranquilo, la gente los vio irse y los reconoció; entonces de todos los poblados fueron por tierra a aquel sitio y se les adelantaron. Cuando JESÚS desembarcó, vio una numerosa multitud que lo estaba esperando y se compadeció de ellos, porque andaban  como ovejas sin pastor, se puso a enseñarles, muchas cosas.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

Lucas 9; 23 – 26

JESÚS dijo a la multitud: “Si alguno quiere acompañarme, que se olvide de si mismo, que tome su cruz y me siga. Pues el que quiera conservar su vida la perderá, pero el que pierda su vida por mi causa, ése la encontrará. En efecto, ¿de que le sirve a un hombre, ganar todo el mundo, si se pierde a si mismo o se destruye? Por otra parte, si alguien se avergüenza de mi, y mis palabras, también el Hijo del Hombre se avergonzará de él cuando venga revestido se su gloria y de la del PADRE, y la gloria de todos los ángeles con ÉL”.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

Marcos 6; 7 – 13

JESÚS llamó a los doce, los envió de dos en dos y le dio poder sobre los espíritus impuros. Les mando que no llevaran nada para el camino: Ni pan, dinero; sino un bastón, sandalias y una túnica. Y les dijo: “Cuando entren en una casa, quédense en ella hasta que se vayan de esa ciudad. Si en alguna parte no los reciben ni los escuchan, al abandonar ese lugar, sacúdanse el polvo de los pies, como una advertencia para ellos”. Los Discípulos se fueron a predicar la conversión. Expulsaban a los demonios, ungían con aceite a los enfermos y los curaban.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR JESÚS.

 

Marcos 6; 1 – 6

JESÚS fue a su tierra en compañía de sus Discípulos. Cuando llegó el sábado, se puso a enseñar en la sinagoga, y la multitud que lo escuchaba se preguntaba con asombro: ¿De dónde aprendió este hombre tantas cosas? ¿de done le viene esa sabiduría y ese poder para hacer milagros? ¿Qué no es éste el carpintero, hijo de María, Hermano de Santiago, José y Simón? ¿No viven aquí, entre nosotros sus hermanas? Y estaban desconcertados.

Pero JESÚS les dijo: “todos honran a un profeta, menos a los de su tierra, sus parientes y los de su casa”. Y no pudo hacer allí ningún milagro, solo curó algunos enfermos imponiéndoles las manos. Y estaba extrañado de la incredulidad de aquella gente. Luego se fue a enseñar a los pueblos vecinos.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

Lucas 2; 22 – 40

Transcurrido el tiempo de purificación de María, según la ley de Moisés, llevaron al niño a Jerusalén para presentarlo al SEÑOR, de acuerdo a lo establecido en la ley: “Todo primogénito varón, será consagrado al SEÑOR” y también para ofrecer como dice la ley un par de tórtolas o dos pichones. Vivía allí un hombre llamado Simeón, justo y temeroso de DIOS, en él moraba el Espíritu Santo, y le había revelado que no moriría hasta ver al salvador del pueblo de Israel. Movido por el Espíritu fue al Templo, y cuando José y María estaban con el niño JESÚS, para cumplir con la ley, Simeón tomo al niño en brazos y bendijo al SEÑOIR diciendo: SEÑOR, ya pueden dejar morir en paz a tu siervo, `porque mis ojos han visto a tu salvador, la luz que alumbra las naciones y la gloria de tu pueblo Israel. Y le dijo a María: este niño ha sido puesto para ruina y resurgimiento de muchos en Israel. Y a ti una espada te atravesará el alma. También había una profetiza llamada Ana, tenia ochenta y cuatro años de edad, viuda de muy joven, vivía para servir a DIOS, con ayunos y oraciones. A todos le contaba que había conocido al niño que traería la liberación para Israel. Sus padre volvieron a Nazaret con el niño, mientras crecía y se fortalecía, y se llenaba de sabiduría, y la gracia de DIOS estaba con ÉL.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

Marcos 5; 1 – 20

Después de atravesar el lago de Genesaret, llegaron a la otra orilla, a la región de los Garasenos, Al desembarcar vio JESÚS a un hombre poseído por un espíritu impuro que vivía en el cementerio, no lo podían sujetar ni con cadenas. Se pasaba los días y noches en los sepulcros gritando y golpeándose. Cuando lo vio a JESÚS, vino corriendo y se postro a sus pies, y gritándole le dijo: ¿Qué quieres tú conmigo, JESÚS, Hijo de DIOS Altísimo? Te ruego por DIOS que no me atormentes. Dijo esto, porque JESÚS le pidió que dejara el cuerpo de ese hombre. Entonces le pregunto JESÚS: “¿Cómo te llamas?” le respondió: Me llamo Legión, porque somos muchos, y le rogaba con insistencia que no lo expulsara de aquella comarca. Había allí una gran piara de cerdos, los espíritus rogaron a JESÚS: déjanos salir de aquí y meternos en esos cerdos. Se metieron en los cerdos y luego se precipitaron por el acantilado al mar.

Los que cuidaban los cerdos fueron a contar lo sucedido al pueblo, vieron al endemoniado sano y vestido, entonces tuvieron miedo, y le rogaron a JESÚS que se marchara de su comarca. El hombre que había sido curado por JESÚS le pidió acompañarlo, pero JESÚS no se lo permitió, y le dijo: “Vete a tu casa y cuéntales lo misericordioso que ha sido el SEÑOR contigo”. El hombre se alejo y comenzó a divulgar lo sucedido a toda la gente de la región, y todos lo que los oían se admiraban.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.