Mateo 23

Versículo 25 al 28

¡Ay de ustedes maestros de la ley y fariseos hipócritas! Ustedes llenan el plato y la copa con robos y violencia y; por encima, echan una bendición. ¡Fariseo ciego! Haz que sea puro en interior y, después se purifica también el exterior.

¡Ay de ustedes maestros de la ley y fariseos hipócritas! Pues ustedes son semejante a sepulcros bien pintados que tienen buena apariencia, pero por dentro están llenos de huesos y de toda clase de podredumbre. Ustedes también aparecen exteriormente como hombres religiosos, pero en su interior están llenos de hipocresía y de maldad.

Todo hombre sabe interiormente si esta haciendo las cosa bien o no, por mas que se muestre como bondadoso ante todos, si en su corazón lo hace pensando en que así podrá salvarse, no es sincero. Y no se salvará si lo hace esperando algo a cambio.