YO soy el buen pastor (Juan 10; 11 - 18)

“Yo soy el buen pastor. El buen pastor da su vida por las ovejas. No así el asalariado, que no es pastor ni las ovejas son suyas. Cuando ve venir al lobo, huye abandonando las ovejas, y el lobo las agarra y las dispersa. A él solo le interesa el salario y no le importan anda las ovejas.

YO soy el buen pastor y conozco a los míos, como los míos me conocen a MI, lo mismo que el PADRE me conoce a MI yo conozco al PADRE. Y YO doy mi vida por las ovejas.

Tengo otras ovejas que no son de este corral. A esas también las llevaré; escucharán mi voz, y habrá un solo rebaño con un solo pastor.

El PADRE me ama porque doy mi vida para retomarla de nuevo. Nadie me la quita, sino que Yo mismo la entrego. En mis manos esta el entregarla y el recobrarla este es el mandato que recibí de mi PADRE.”

Comentario

“‘Yo soy el buen Pastor’, es decir, el pastor verdadero, el único pastor, el único que sabe guiar, el pastor que se sacrifica por defender y salvar a su grey. Y la grey ¿qué significa? Significa la humanidad, significa el mundo, nosotros. Esta imagen, a nosotros los modernos, nos dice menos que a los antiguos, más habituados que nosotros a contemplar la escena campestre del pastor que conduce su grey a los pastos. Pero es una imagen tan sencilla y hermosa, que también nos puede servir a nosotros para significar la reunión de los muchos seguidores, llevados a una y conducidos por un solo jefe, por un solo guía” (Papa Pablo VI, audiencia general del 11/5/1966).