Lo que DIOS unió, no lo
separe el hombre (Marcos 10, 1 - 10)
JESUS dejó
aquel lugar y se fue a los limites de Judea, al otro lado del Jordán. Otra vez
las muchedumbres se congregaron a su alrededor, y de nuevo se puso a
enseñarles, como hacia siempre. En eso llegaron unos (Fariseos que querían
ponerlo a prueba) y le preguntaron: ¿Puede un marido despedir a su esposa? Les
respondió: “¿Qué les ha ordenado Moisés?” Contestaron: Moisés ha permitido
firmar un acta de separación y después divorciarse.
JESUS les dijo:
“Moisés, al escribir esta ley, tomo en cuenta lo tercos que eran ustedes. Pero
al principio de la creación DIOS los hizo hombre y mujer; por eso dejará el
hombre a su padre y a su madre para unirse con su esposa, y serán los dos una
sola carne. De manera que ya no son dos sino uno solo. Pues bien, lo que DIOS
ha unido, que el hombre no lo separe.”
Cuando ya estaban
en casa, los Discípulos volvieron a preguntarle sobre lo mismo y El les dijo: “El
que se separa de su mujer y se casa con otra mujer, comete adulterio contra su
esposa, y si la esposa abandona a su marido para casarse con otro hombre, también
esta comete adulterio.”
No hay comentarios:
Publicar un comentario