sábado, 30 de noviembre de 2013

JESUS es tentado en el desierto (Mateo 4, 18-22)

Mientras JESUS caminaba a orillas del mar de Galilea, vio a dos hermanos; uno era Simón, llamado Pedro y el otro Andrés. Eran pescadores y estaban echando las redes al mar. JESUS los llamo: “Síganme, Yo los haré pescadores de hombres” Al instante dejaron las redes y lo siguieron.
Mas adelante vio a otros dos hermanos: Santiago, hijo de Zebedeo, con su hermano Juan; con su padre en la barca arreglando las redes. JESUS los llamo, y en seguida ellos dejaron la barca y a su padre y los siguieron.

Comentario

Jesús transforma nuestra vida. Entra en cada uno, nos mira, nos habla y nos invita a seguirlo. Desde que nos encontramos con él, nuestra actividad también cambia. Desde ese momento, dejamos de ser como éramos antes, no hacemos más lo mismo.


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