Corintios 9
¿No saben que los que trabajan en el
servicio sagrado son mantenidos por el templo, y los que sirven al altar
reciben su parte de lo que ha sido ofrecido sobre el altar? El SEÑOR ha
ordenado, de igual manera, que los que anuncian el Evangelio vivan del
Evangelio. Pero yo no he hecho uso de tales derechos ni tampoco les escribo ahora
para reclamarles nada.
¡Antes de morir! Eso es para mi una gloria
que nadie me podrá quitar.
Pues ¿Cómo podría alardear de anunciar el
Evangelio? Estoy obligado a hacerlo, y ¡pobre de mi si no proclamo el Evangelio!
Si lo hiciera por decisión propia, podría esperar recompensa, pero si fue a pesar mío, no queda mas que cumplir.
Entonces, ¿Cómo podré merecer alguna recompensa? Dando el evangelio
gratuitamente, y sin hacer valer mis derechos de evangelizador.
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