Proverbios 30
No conviene que los reyes ¡oh Lemuel!, no conviene que los
reye beban vino ni que los gobernantes gusten de licores fuertes.
No sea que al beber olviden lo que ordenaron y falseen la
causa de los desamparados.
Da bebidas fuerte al que debe morir, y vino al corazón
amargado; que beba, que olvide su desgracia, que no recuerde ya su pena. Abre
la boca a favor del mudo, y defiende la causa de todos los abandonados.
Abre la boca, pronuncia sentencias justas, haz justicia a
los desdichados e indigentes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario