Proverbios 31
¿Deseaba un campo?, lo ha comprado; con su propio trabajo plantó
una viña.
Esta llena de fortaleza y vigoriza sus brazos.
Ella sabe que su trabajo prospera, su lámpara no se apaga
por la noche.
Echa mano a la rueca de sus dedos hace girar el huso.
Tiende su mano al desamparado y da al pobre.
No teme a la nieve para los suyos, porque tienen todos doble
vestido.
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