Proverbios 5
¡Bendita sea tu fuente, y sea tu alegría la mujer de tu
noviazgo! ¡Sea para ti como hermosa sierva y graciosa gacela; que sus pechos
sean tu recreo en todo tiempo, que siempre estés apasionado por ella!
¿Cómo te apasionarías, hijo, por una desvergonzada y
reposarías en el regazo de una ajena?
YABE observa los caminos del hombre y nota todos sus pasos.
El malvado será presa de sus propias maldades y quedara
enredado en los lazos de su pecado.
Morirá por f alta de disciplina, se perderá cuando sus
errores lleguen al colmo.
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