miércoles, 30 de septiembre de 2015

Lucas 9; 57 – 62

Mientras iban caminando, alguien le dijo: Maestro, te seguiré a donde quiera que vayas. JESUS le contesto: “Los zorros tienen cuevas y las aves tienen nidos, pero el Hijo del Hombre no tiene donde recostar la cabeza.”
JESUS dijo a otro: “Sígueme” El contestó: SEÑOR, deja que me vaya y pueda enterrar primero a mi padre. JESUS le contesto: “El que pone la mano en el arado y mira hacia atrás, no sirve para el Reino de DIOS”
Palabra del Señor.

Comentario

Ante el llamado de Jesús no se puede calcular, ni medir, ni excusarse. Jesús espera una respuesta que incluya la confianza en la Providencia, y caminar hacia adelante, sin añorar lo que se ha dejado.


martes, 29 de septiembre de 2015

Juan 1; 47 – 51

Cuando JESUS vio venir a Natanael, dijo de él: “Ahí viene un verdadero Israelita, ese no sabría engañar” Natanael le pregunto: ¿Cómo me conoces? JESUS le respondió: “Antes de que Felipe te llamara, cuando estabas bajo la higuera Yo te vi”
Natanael exclamó: Maestro, tu eres el Hijo de DIOS, tú eres el Rey de Israel. JESUS le dijo: “Tu crees porque te dije que te vi debajo de la higuera; sin embargo verás cosas mayores que estas.
En verdad les digo que ustedes verán los cielos abiertos  y a los ángeles de DIOS subiendo y bajando sobre el Hijo del Hombre.”
Palabra del Señor.

Comentario


Jesús le quiere enseñar a Natanael que la fe no tiene límites. Una vez que ha llegado a una confesión tan majestuosa aún le falta ver algo más: la Gloria de Dios, en todo su esplendor.

lunes, 28 de septiembre de 2015

Lucas 9; 46 – 50

A los Discípulos se les ocurrió preguntar cual de ellos era el mas importante. JESUS, que conocía sus pensamientos, tomo a un niño, lo puso a su lado y les dijo: “el que recibe a este niño en Mi nombre, me recibe a Mi; y el que me recibe a Mi, recibe al que me envió. El mas pequeño entre todos ustedes, ese es realmente grade.”
En ese momento Juan tomo la palabra y le dijo: Maestro, Hemos visto a uno que hace uso de tu nombre para echar fuera los demonios, y le dijimos que no lo hiciera, pues no te sigue junto a nosotros. Pero JESUS les dijo: “No se lo impidan, pues el que no esta contra  ustedes, esta con ustedes.”
Palabra del Señor.

Comentario


Nos guiamos por apariencias y prejuicios. Y Jesús se empecina en que veamos lo que él ve en quienes son tenidos en menos, en quienes parecen que no valen nada, en quienes no pueden siquiera opinar.

viernes, 25 de septiembre de 2015

Lucas 9; 19 – 22

Ellos contestaron: Unos dicen que eres Juan el Bautista, otros que eres Elías, y otros que eres alguno de los profetas antiguos que ha resucitado. Entonces les pregunto: “Y ustedes, ¿Quién dicen que soy YO?” Pedro respondió: Tu eres el Cristo de DIOS. JESUS les hizo esta advertencia: “No se lo  digan a nade”
Y  les decía: “El Hijo del Hombre tiene que sufrir mucho y ser rechazado por las autoridades judías por los jefes de los sacerdotes y por los maestros de la ley. Lo condenarán a muerte, pero tres días después resucitará.”
Palabra del Señor.

Comentario

Jesús corrige las expectativas de su pueblo. Él no es ninguno de los profetas resucitado, ni un mesías que vendría de modo glorioso. Su mesianismo es desde el dolor y la cruz. Un mesianismo incompresible e inesperado, aún hoy para nosotros.


jueves, 24 de septiembre de 2015

Lucas 9; 7 – 9

El virrey Herodes se entero de todo lo que estaba ocurriendo y no sabía que pensar, porque unos decían: Es Juan, que ha resucitado de entre los muertos; y otros: Es Elías que ha reaparecido; y otros; Es algunos de los antiguos profetas que ha resucitado. Pero Herodes se decía: A Juan le hice cortar la cabeza, ¿Quién es entonces éste, del cual me cuentan cosas tan raras? Y tenía ganas de verlo.
Palabra del Señor.

Comentario

Herodes no quería ver a Jesús para creer en él, o porque lo motivara un deseo de verdad y justicia. Él tenía un gran interrogante: ¿Sería Jesús la reencarnación de Elías? ¿o de otro profeta? A Herodes le preocupaba que un profeta lo increpara y lo pusiera en ridículo frente al pueblo.


miércoles, 23 de septiembre de 2015

Lucas 9; 1 – 6

JESUS reunió a los doce y les dio autoridad para expulsar a todos los malos espíritus y poder curar enfermedades. Después los envió a anunciar el Reino de DIOS y devolver la salud a las personas.
Les dijo: “No lleven nada para el camino; ni bolsa colgada del batón, ni pan, ni plata, ni siquiera vestido de repuesto. Cuando los reciban en una casa, quédense en ella hasta que se vayan de ese lugar. Pero donde no los quieran recibir, no salgan del pueblo sin antes sacudir el polvo de sus pies; esto será un testimonio contra ellos.”
Ellos partieron a recorrer los pueblos; predicaban la Buena Nueva y hacían curaciones en todos los lugares.

Comentario

“Jesús le encomendó a sus discípulos durante su ministerio público la tarea de difundir con signos y palabras el mensaje que él anunciaba. La naturaleza de esta misión explica las exigencias tan radicales de la llamada y el seguimiento. Para poder llevar a cabo la misión, los discípulos deben renunciar a ciertas ataduras y obligaciones para poder dedicarse completamente, así como Jesús, a esta” (http://www.celam.org/plan_07-11_llamados.php).


martes, 22 de septiembre de 2015

Lucas 8; 19 – 21

Su madre y sus hermanos querían verlo, pero no podían llegar hasta El por el gentío que había. Alguien dio a JESUS este recado: Tu madre y tus hermanos están afuera y quieren verte. JESUS respondió: “Mi madre y mis hermanos son los que escuchan la Palabra de DIOS y la cumplen”
Palabra del Señor.

Comentario

Si estamos rodeando a Jesús, si lo estamos escuchando, si queremos vivir lo que nos enseña, entonces estamos en el grupo que el Señor hoy reconoce como su familia.


Lucas 8; 19 – 21

Su madre y sus hermanos querían verlo, pero no podían llegar hasta El por el gentío que había. Alguien dio a JESUS este recado: Tu madre y tus hermanos están afuera y quieren verte. JESUS respondió: “Mi madre y mis hermanos son los que escuchan la Palabra de DIOS y la cumplen”
Palabra del Señor.

Comentario

Si estamos rodeando a Jesús, si lo estamos escuchando, si queremos vivir lo que nos enseña, entonces estamos en el grupo que el Señor hoy reconoce como su familia.


lunes, 21 de septiembre de 2015

Mateo 9; - 13

JESUS, al irse de allí, vio a un hombre llamado Mateo en su puesto de cobrador de impuestos, y le dijo: “Sígueme” Mateo se levantó y lo siguió. Como JESUS estaba comiendo en casa de Mateo, un buen número de cobradores de impuestos y otra gente pecadora vinieron a sentarse en la mesa con JESUS y sus Discípulos. Los Fariseos, al ver esto, decían a los Discípulos: ¿cómo es que su Maestro come con cobradores de impuestos y pecadores?
JESUS oyó y dijo: “No es la gente sana la que necesita medico, sino los enfermos. Vayan y aprendan lo que significa esta palabra de DIOS: Me gusta mas la misericordia que las ofrendas. Pues no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores. ”
Palabra del Señor.

Comentario

La imagen de este relato nos sorprende. El hombre “se levantó”, sin dudarlo, sin pensarlo, sin mediar otra cosa que la palabra de Jesús que lo llamaba. Para el evangelio no significa un simple gesto de salir de la comodidad de una silla. “Levantarse” es recuperar una dignidad perdida para así, de pie, y en movimiento, ir detrás de Jesús y seguirlo.


domingo, 20 de septiembre de 2015

Marcos 9; 30 – 37

Se marcharon de allí y se desplazaban por Galilea. JESUS quería que nadie lo supiera, porque iba enseñando a sus Discípulos. Y les decía: “El Hijo del Hombre va a ser entregado en manos de los hombres, y lo harán morir, pero tres días después de su muerte resucitará.” De todos modos los Discípulos no entendían de los que hablaba, y tenían miedo de preguntarle que quería decir.
Llegaron a Cafarnaúm, y una vez en casa,  JESUS les pregunto: “¿De que venían discutiendo por el camino?” Ellos se quedaron callados, pues habían discutido entre si cual de ellos era el mas importante de todos.
Entonces se sentó, llamo a los doce y les dijo: “Si alguno quiere ser el primero, que se haga el ultimo y servidor de todos.” Después tomo a un niño, lo puso en medio de ellos lo abrazó y les dijo: “El que recibe a un niño como este en Mi nombre, me recibe a Mi; y el que me recibe, no me recibe a Mi, sino al que me ha enviado.”
Palabra del Señor.

Comentario

“Seamos cristianos actuales, no nos asustemos de las audacias de la Iglesia actual. Con la luz de Cristo iluminemos al hombre hasta en sus antros más horrorosos: la tortura, la prisión, el despojo, la marginación, la enfermedad crónica. Al hombre oprimido hay que salvarlo pero no con una salvación revolucionaria solamente a lo humano, sino con la revolución santa del Hijo del Hombre que muere en la cruz precisamente para limpiar la imagen de Dios que se ha manchado en la humanidad actual tan esclavizada, tan egoísta, tan pecadora” (Beato O. Romero, 23/9/1979).


sábado, 19 de septiembre de 2015

Evangelio     Lc 8, 4-15

Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.
Como se reunía una gran multitud y acudía a Jesús gente de todas las ciudades, él les dijo, valiéndose de una parábola: “El sembrador salió a sembrar su semilla. Al sembrar, una parte de la semilla cayó al borde del camino, donde fue pisoteada y se la comieron los pájaros del cielo. Otra parte cayó sobre las piedras y, al brotar, se secó por falta de humedad. Otra cayó entre las espinas, y éstas, brotando al mismo tiempo, la ahogaron. Otra parte cayó en tierra fértil, brotó y produjo fruto al ciento por uno”. Y una vez que dijo esto, exclamó: “¡El que tenga oídos para oír, que oiga!”. Sus discípulos le preguntaron qué significaba esta parábola, y Jesús les dijo: “A ustedes se les ha concedido conocer los misterios del Reino de Dios; a los demás, en cambio, se les habla en parábolas, para que miren sin ver y oigan sin comprender. La parábola quiere decir esto: La semilla es la Palabra de Dios. Los que están al borde del camino son los que escuchan, pero luego viene el diablo y arrebata la Palabra de sus corazones, para que no crean y se salven. Los que están sobre las piedras son los que reciben la Palabra con alegría, apenas la oyen; pero no tienen raíces: Creen por un tiempo, y en el momento de la tentación se vuelven atrás. Lo que cayó entre espinas son los que escuchan, pero con las preocupaciones, las riquezas y los placeres de la vida, se van dejando ahogar poco a poco, y no llegan a madurar. Lo que cayó en tierra fértil son los que escuchan la Palabra con un corazón bien dispuesto, la retienen, y dan fruto gracias a su constancia”.
Palabra del Señor.

Comentario

El ministerio de la Palabra, la evangelización, no discrimina ni privilegia a nadie. Es necesario predicar en terrenos considerados fértiles y en otros áridos y secos. Justamente porque nadie puede quedar exento de la posibilidad de recibir o no esta Palabra. En esos momentos es donde se juega la libertad ante el don.

viernes, 18 de septiembre de 2015

Lucas 8; 1 – 3

JESUS iba recorriendo ciudades y aldeas predicando y enseñando la Buena Nueva del Reino DIOS. Lo acompañaban los doce y también algunas mujeres a las que había curado de espíritus malos o de enfermedades. María, por sobre nombre Magdalena, de la que habían salido siete demonios; Juana, mujer de un administrador de Herodes llamado Cuza; Susana, y varias otras que los atendían con sus propios recursos.
Palabra del Señor.

Comentario


“Estas mujeres son modelo de discipulado: siguen a Jesús, habiendo antes experimentado su salvación, y ellas y sus bienes se ponen al servicio del Mesías y del anuncio del Reino de Dios” (Luis H. Rivas, "La obra de Lucas", I. El Evangelio, Ed. Agape).

jueves, 17 de septiembre de 2015

Lucas 7; 36 – 50

Un Fariseo invito a JESUS a comer. Entro  en casa del Fariseo y se reclino en el sofá para comer. En aquel pueblo había una mujer conocida como una pecadora; al enterarse de que JESUS estaba comiendo en casa del Fariseo, tomo un frasco de perfume, se colocó detrás de El, a sus pies, y se puso a llorar. Sus lágrimas comenzaron a regar los pies de JESUS y ella trato de secarlos con su cabello. Luego le besaba los pies y derramaba sobre ellos el perfume.
Al ver esto el Fariseo que lo había invitado, se dijo interiormente: Si este hombre fuera profeta, sabría que la mujer que lo esta tocando es una pecadora, conocería a la mujer y lo que vale.
Pero JESUS, tomando la palabra, le dijo: “Simón, tango algo que decirte” Simón contesto: Habla maestro. Y JESUS le dijo: “Un prestamista tenía dos deudores, unos le debía quinientas monedas y el otro cincuenta. Como no tenían con que pagarle, les perdono la deuda a ambos. ¿Cuál de los dos lo querrá mas?” Simón le contesto: Pienso que aquel al que le perdono mas. Y JESUS le dijo: “Haz juzgado bien” Y volviendo hacia la mujer le dijo a Simón: “¿Ves a este mujer? Cuando entre en tu casa, no me ofreciste agua para los pies, mientras que ella me ha lavado los pies con sus lágrimas y me los ha secado con sus cabellos.
Tu no me has recibido con un beso, pero ella, desde que entro, no ha dejado de cubrirme los pies con besos. Tu no me ungiste la cabeza con aceite; ella, en cambio ha derramado perfume sobre mis pies. Por eso te digo que sus pecados, sus numerosos pecados, le quedan perdonados, por el mucho amor que me ha manifestado. Pero en cambio a aquel que se le perdona poco, demuestra poco amor.”
JESUS dijo después a la mujer: “Tus pecados te quedan perdonados” Y los que estaban en la mesa empezaron a pensar: ¿así que ahora pretende perdonar los pecados? Pero de nuevo JESUS se dirigió a la mujer: “Tu fe te ha salvado vete en paz.”
Palabra del Señor.

Comentario

La actitud de Jesús revoluciona al auditorio. No solo recibe a esta mujer, sino que deja que ella lo toque, y lo bese. Y además, la pone de ejemplo de humildad para el resto de los presentes. Y como si eso fuera poco, anuncia que sus pecados son perdonados. ¿Qué ha llevado a esta situación? Sin dudas la valentía de la mujer y el amor de Jesús.


miércoles, 16 de septiembre de 2015

Evangelio     Lc 7, 31-35

Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.
Dijo el Señor: ¿Con quién puedo comparar a los hombres de esta generación? ¿A quién se parecen? Se parecen a esos muchachos que están sentados en la plaza y se dicen entre ellos: “¡Les tocamos la flauta, y ustedes no bailaron! ¡Entonamos cantos fúnebres, y no lloraron!”. Porque llegó Juan el Bautista, que no come pan ni bebe vino, y ustedes dicen: “¡Tiene un demonio!”. Llegó el Hijo del hombre, que come y bebe, y dicen: “¡Es un glotón y un borracho, amigo de publicanos y pecadores!”. Pero la Sabiduría ha sido reconocida como justa por todos sus hijos.
Palabra del Señor.

Comentario


“La invitación es, entonces, a ver en cada circunstancia la acción de Dios, no encerrarnos en nuestros propios criterios, recordar siempre que los designios de Dios no coinciden casi nunca con los nuestros; muchas veces quisiéramos que Dios actuara de esta o aquella manera, pero no es así” (comentario de La Biblia de Nuestro Pueblo, Ed. Mensajero).

lunes, 14 de septiembre de 2015

Juan 3; 13 – 17

“Sin embargo, nadie a ha subido al cielo sino solo el que ha bajado del cielo, el Hijo del Hombre.
Recuerden la serpiente que Moisés hizo levantar en el desierto; así también tiene que ser levantado el Hijo del Hombre, así todo el que crean en El tendrá por El la vida eterna.
¡Así amó DIOS al mundo! Le dio al Hijo Único, para que quien cree en EL no se pierda, sino que tenga vida eterna. DIOS no envió al Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que se salve el mundo gracias a El”
Palabra del Señor.

Comentario

Jesús viene del mundo de arriba, de la intimidad con Dios. Él es, por lo tanto, quien nos puede enseñar las cosas de arriba. No dejemos que nuestra vida se enrosque en cosas rastreras. No dejemos que el pecado nos tire para abajo. Levantemos la cabeza, miremos a Jesús, busquemos con él las cosas de arriba, y entraremos en la intimidad con Dios.


domingo, 13 de septiembre de 2015

Marcos 8; 27 – 35

Salió JESUS con sus Discípulos hacia el pueblo de Casacrera de Filipo, y por el camino les pregunto: “¿Quién dice la gente que soy YO?” Ellos contestaron: Algunos dicen que eres Juan el Bautista, otros Elías o alguno de los profetas.
Entonces JESUS les pregunto: “Y ustedes, ¿Quién dicen que soy YO?” Pedro le contesto: TU eres el Mesías, Pero JESUS les dijo con firmeza que no conversaran sobre El.
Luego comenzó a enseñarles que el Hijo del hombre debía sufrir mucho y ser rechazado por los notables, los jefes de los sacerdotes y los maestros de la ley que sería condenado a muerte y que resucitaría a los tres días. JESUS hablaba de esto con mucha seguridad.
Pedro, pues, lo llevó aparte y comenzó a reprenderlo. Pero JESUS, dándose la vuelta, vio muy cerca a sus discípulos. Entonces reprendiendo a Pedro le dijo: “¡Apártate de Mi satanás! Tus ambiciones no son las de DIOS, sino de los hombres.”
Entonces JESUS llamo a sus Discípulos y a toda la gente le dijo: “El que quiera seguirme, que renuncie a si mismo, tome su cruz y me siga. Pues el que quiera asegurar su vida la perderá, y el que sacrifique su vida (por MI) y por el evangelio la salvará.”
Palabra del Señor.

Comentario

Pedro contestó con impulsividad y convicción. Pero aún le faltaba comprender el alcance de la palabra Mesías. Jesús era el Ungido de Dios, pero no realizaría su mesianismo con ejércitos ni imperios, sino desde el servicio y el sufrimiento. También nosotros, como Pedro, necesitamos renunciar a las expectativas triunfalistas para ser una Iglesia servidora y dispuesta a compartir el sufrimiento de los hombres.


viernes, 11 de septiembre de 2015

Lucas 6; 37 – 42

“No juzguen y no serán juzgados; no condenen y no serán condenados; perdonen y serán perdonados. Den, y se les dará; se les echara en su delantal una medida colmada, apretada y rebosante. Porque con la medida que ustedes midan serán medidos ustedes.”
JESUS les puso también esta comparación: “¿Puede un ciego guiar a otro ciego? Ciertamente caerán ambos en un hoyo. El discípulo no esta por encima de su maestro, pero si se deja formar, se parecerá a su maestro.
¿Y porque te fijas en la pelusa que tiene tu hermano en el ojo, si no eres consiente de la viga que tienes en el tuyo? ¿Cómo puedes decir a tu hermano: Hermano, deja que te saque la pelusa que tienes en el ojo, si tu no ves la viga que tienes en el tuyo? Hipócrita, saca la viga primero de tu propio ojo, para que veas con claridad, y entonces sacaras la pelusa del ojo de tu hermano.”
Palabra del Señor.

Comentario


¿Cómo es nuestra medida? ¿Cuánto calculamos, en las relaciones y en el compartir? Dios ama gratuita y generosamente, Dios es puro derroche de amor. No ha establecido una relación hecha de medidas, sino de puro desborde de amor. No calculemos, dejemos lugar al Espíritu Santo para que obre libremente en nuestra existencia.

jueves, 10 de septiembre de 2015

Lucas 6; 27 – 36

“YO les digo a ustedes que me escuchan: amen a sus enemigos, hagan el bien a los que lo odian, bendigan a los que los maldicen, rueguen por los que los maltratan. Al que te golpea en una mejilla, preséntale también la otra. Al que te arrebata el manto, entrégale también el vestido. Da al que pide, y al que te quita lo tuyo, no se lo reclames.
Traten a los demás como quieren que ellos lo traten a ustedes. Porque si ustedes aman a los que los aman, ¿Qué merito tiene? Hasta los malos aman a los que los aman. Y si le hacen el bien a los que les hacen el bien ¿Qué gracia tiene? También los pecadores obran así. Y si prestan algo a los que le pueden retribuir, ¿Qué gracia tiene? También los pecadores prestan a pecadores para que estos correspondan con algo.
Amen a sus enemigos, hagan el bien y presten sin esperar nada a cambio. Entonces la recompensa de ustedes será grande y serán hijos del Altísimo, que es bueno con los ingratos y pecadores. Sean compasivos como es compasivo el PADRE de ustedes.”
Palabra del Señor.

Comentario

A esos pobres y enfermos que lo seguían, Jesús les presenta el modo de vida del Reino de Dios. Amar con tal entrega y desprendimiento como para amar incluso al enemigo. No hay fuerza humana que haga esto, sólo el poder de Dios obrando en nosotros lo hace posible. Quien ha experimentado la sanación y el perdón que Dios trae, puede  amar de ese modo.


miércoles, 9 de septiembre de 2015

Lucas 6; 20 – 26

EL, entonces dirigió la mirada a sus Discípulos y les dijo: “Felices ustedes los pobres, porque de ustedes es el Reino de DIOS. Felices ustedes los que tienen hambre, porque serán saciados. Felices ustedes los que lloran, porque reirán. Felices ustedes si los hombres los odian, los expulsan, los insultan y los consideran unos delincuentes a causa del Hijo del Hombre. Alégrense en ese momento y llénense de gozo; porque les espera una recompensa grande en el cielo. Recuerden que de esa manera trataron también a los profetas en tiempos de sus padres.
Pero ¡Pobre de ustedes, los ricos, porque tienen ya su consuelo!, ¡Pobre de ustedes, los que ahora están satisfechos, porque después tendrán hambre! ¡Pobres de ustedes los que ahora ríen, porque van a llorar de pena! ¡Pobres de ustedes cuando todos hablen bien de ustedes, porque de esa misma manera trataron a los falsos profetas en tiempos de sus antepasados!”
Palabra del Señor.

Comentario


Jesús afirma, en presente, dirigiéndose a sus seguidores: “¡Felices ustedes, los pobres, porque de ustedes es el Reino de Dios!”. Únicamente quien ha aprendido a confiar sólo en Dios, puede vivir el Reino. Únicamente quien ha abandonado la falsa seguridad de su posición, recibe el Reino como regalo. El Reino es de los pobres, porque son los pobres quienes están dispuestos a recibirlo, y a dejar que sólo Dios sea Señor en sus vidas.

Lucas 6; 20 – 26

EL, entonces dirigió la mirada a sus Discípulos y les dijo: “Felices ustedes los pobres, porque de ustedes es el Reino de DIOS. Felices ustedes los que tienen hambre, porque serán saciados. Felices ustedes los que lloran, porque reirán. Felices ustedes si los hombres los odian, los expulsan, los insultan y los consideran unos delincuentes a causa del Hijo del Hombre. Alégrense en ese momento y llénense de gozo; porque les espera una recompensa grande en el cielo. Recuerden que de esa manera trataron también a los profetas en tiempos de sus padres.
Pero ¡Pobre de ustedes, los ricos, porque tienen ya su consuelo!, ¡Pobre de ustedes, los que ahora están satisfechos, porque después tendrán hambre! ¡Pobres de ustedes los que ahora ríen, porque van a llorar de pena! ¡Pobres de ustedes cuando todos hablen bien de ustedes, porque de esa misma manera trataron a los falsos profetas en tiempos de sus antepasados!”
Palabra del Señor.

Comentario

Jesús afirma, en presente, dirigiéndose a sus seguidores: “¡Felices ustedes, los pobres, porque de ustedes es el Reino de Dios!”. Únicamente quien ha aprendido a confiar sólo en Dios, puede vivir el Reino. Únicamente quien ha abandonado la falsa seguridad de su posición, recibe el Reino como regalo. El Reino es de los pobres, porque son los pobres quienes están dispuestos a recibirlo, y a dejar que sólo Dios sea Señor en sus vidas.


martes, 8 de septiembre de 2015

Mateo 1; 1 – 16 /18; 23

Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo.
Genealogía de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abraham: Abraham fue padre de Isaac; Isaac, padre de Jacob; Jacob, padre de Judá y de sus hermanos. Judá fue padre de Fares y de Zará, y la madre de éstos fue Tamar. Fares fue padre de Esrón; Esrón padre de Arám; Arám, padre de Aminadab; Aminadab, padre de Naasón; Naasón, padre de Salmón. Salmón fue padre de Booz, y la madre de este fue Rahab. Booz fue padre de Obed, y la madre de éste fue Rut. Obed fue padre de Jesé; Jesé, padre del rey David. David fue padre de Salomón, y la madre de éste fue la que había sido mujer de Urías. Salomón fue padre de Roboam; Roboam, padre de Abías; Abías, padre de Asá; Asá, padre de Josafat; Josafat, padre de Joram; Joram, padre de Ozías. Ozías fue padre de Joatám; Joatám, padre de Acaz; Acaz, padre de Ezequías; Ezequías, padre de Manasés. Manasés fue padre de Amón; Amón, padre de Josías; Josías, padre de Jeconías y de sus hermanos, durante el destierro en Babilonia. Después del destierro en Babilonia: Jeconías fue padre de Salatiel; Salatiel, padre de Zorobabel; Zorobabel, padre de Abiud; Abiud, padre de Eliacím; Eliacím, padre de Azor. Azor fue padre de Sadoc; Sadoc, padre de Aquím; Aquím, padre de Eliud; Eliud, padre de Eleazar; Eleazar, padre de Matán; Matán, padre de Jacob. Jacob fue padre de José, el esposo de María, de la cual nació Jesús, que es llamado Cristo. Éste fue el origen de Jesucristo: María, su madre, estaba comprometida con José y, cuando todavía no habían vivido juntos, concibió un hijo por obra del Espíritu Santo. José, su esposo, que era un hombre justo y no quería denunciarla públicamente, resolvió abandonarla en secreto. Mientras pensaba en esto, el Ángel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: “José, hijo de David, no temas recibir a María, tu esposa, porque lo que ha sido engendrado en ella proviene del Espíritu Santo. Ella dará a luz un hijo, a quien pondrás el nombre de Jesús, porque él salvará a su pueblo de todos sus pecados”. Todo esto sucedió para que se cumpliera lo que el Señor había anunciado por el profeta: “La Virgen concebirá y dará a luz un hijo a quien pondrán el nombre de Emanuel”, que traducido significa: “Dios con nosotros”.

Palabra del Señor.

lunes, 7 de septiembre de 2015

Lucas 6; 6 – 11

Otro sábado JESUS había entrado en la Sinagoga y enseñaba. Había allí un hombre que tenia paralizada la mano derecha. Los maestros de la ley y los fariseos espiaban  jesus para ver si hacía una curación en día sábado  encontrar asi motivos para acusarlo.
Pero JESUS, que conocía sus pensamientos, dijo al hombre que tenía la mano paralizada: “Levántate y ponte ahí en el medio”. El se levantó y permaneció de pie. JESUS les dijo: “¿Que permite hacer la ley en día sábado: hacer el bien o hacer daño, salvar una vida o destruirla?”
Pasando entonces su mirada sobre todos ellos, dijo al hombre: “Extiende tu mano” Lo hizo, y su mano quedo sana. Pero ellos se llenaron de rabia y comenzaron a discutir entre si que podrían hacer contra JESUS.

Palabra del Señor.

Comentario

Dios instituyó el sábado, entre otras cosas, para poner un freno a la explotación y para que ningún integrante del pueblo volviera a ser esclavo como cuando estaban en Egipto. Quienes transformaron la ley del descanso en una norma rígida, corrompieron el sentido de ese mandato. Ellos no contestan la pregunta de Jesús porque, obviamente, el sábado es para salvar la vida. No puede haber un mandato que venga de Dios para dejarnos en la enfermedad y en la parálisis.


domingo, 6 de septiembre de 2015

Marcos 7; 31 – 37

Saliendo de las tierras de Tiró, JESUS paso por Sidón y, dando la vuelta al lago de Galilea, llegó al territorio de la Decapolis. Allí le presentaron a un sordo que hablaba con dificultad, y le pidieron que le impusiera la mano.
JESUS lo aparto de la gente, le metió los dedos en sus oídos y con su saliva le toco la lengua. En seguida levanto los ojos al cielo, suspiró y dijo: “Effeta”, que quiere decir: Ábrete.
Al instante se le abrieron los oídos, le desapareció el defecto de la lengua y comenzó a hablar correctamente. JESUS les mando que no le dijeran a nadie, pero cuando mas insistía, tanto mas ellos lo publicaban. Estaban fuera de si y decían muy asombrados: Todo lo ha hecho bien; hace oír a los sordos y hablar a los mudos.
Palabra del Señor.

Comentario

Jesús estaba en territorio pagano, cuando le trajeron a este hombre sordo y con dificultad para hablar. En la Biblia “ser sordo” o “tener el oído cerrado” es símbolo de la rebeldía de quien no quiere escuchar a Dios. A este pagano, Jesús le abrió el oído y así pudo escuchar su Palabra. Esta es la Buena Noticia: Jesús transforma nuestra sordera, él nos toca el oído y el corazón, y así entramos a formar parte de su pueblo fiel que escucha.


sábado, 5 de septiembre de 2015

Lucas 6; 1- 5

Un sábado, JESUS atravesaba unos sembradíos, y sus Discípulos cortaban espigas, las desgranaban en las manos y se comían el grano. Algunos Fariseos le dijeron: ¿Por qué hacen lo que no eta permitido  hacer en el día sábado? JESUS le respondió: “¿Ustedes no han leído lo que hizo David, y con él sus hombres, un día que tuvieron hambre? Pues entró en la casa de DIOS, tomó lo panes de la ofrenda, lo comió y le dio también a sus hombres a pesar de que solo estaba permitido a los sacerdotes comer de ese pan.”  Y JESUS añadió: “El Hijo del Hombre es SEÑOR y tiene autoridad sobre el sábado.”
Palabra del Señor.

Comentario

Cada día en el templo se preparaban panes consagrados que serían consumidos por los sacerdotes. David, siendo laico, comió de ellos. Con esto Jesús les recuerda a sus críticos que la historia que Dios hizo junto con su pueblo no estuvo basada en prescripciones opresoras, sino al contrario, se fundó en todo lo que está a favor de la vida. El mismo Dios que camina con su pueblo alimentándolo.
 

viernes, 4 de septiembre de 2015

Lucas 5; 33 – 39

Algunos le dijeron: Los discípulos de Juan ayunan a menudo y rezan sus oraciones, y lo mismo hacen los discípulos de los Fariseos mientras que los tuyos comen y beben. JESUS les respondió: “Ustedes no puede obligar a los amigos del novio a que ayunen mientras el novio esta con ellos. Llegará el momento en que les será quitado el novio, y entonces ayunarán.”
JESUS les propuso además esta comparación: “Nadie saca un pedazo de un vestido nuevo para remendar uno viejo, ¿Quién va a romper algo nuevo, para que después el pedazo tomado del nuevo no le venga bien al vestido viejo?. Nadie echa tampoco vino nuevo en envases de cuero viejos; si lo hace, el vino nuevo hará reventar los envases, se derramará el vino y se perderán también los envases. Pongan el vino nuevo en envases nuevos. Y miren: El que esté acostumbrado al añejo no quera vino nuevo, sino que dirá: El añejo es el bueno.”
Palabra del Señor.

Comentario

Jesús critica una religión “arreglada con parches”: Se ajusta alguna cosita, se habla de novedad, pero en el fondo, el espíritu de lo caduco sigue presente. El Reino de Dios que llega con Jesús exige renovación total: De las prácticas y de los corazones. Nuestra conversión no puede ser un maquillaje o un barniz. Hay que arrancar lo viejo y animarse a la novedad de lo que Dios trae con su reinado.


jueves, 3 de septiembre de 2015

Evangelio     Lc 5, 1-11

Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.
En una oportunidad, la multitud se amontonaba alrededor de Jesús para escuchar la Palabra de Dios, y él estaba de pie a la orilla del lago de Genesaret. Desde allí vio dos barcas junto a la orilla del lago; los pescadores habían bajado y estaban limpiando las redes. Jesús subió a una de las barcas, que era de Simón, y le pidió que se apartara un poco de la orilla; después se sentó, y enseñaba a la multitud desde la barca. Cuando terminó de hablar, dijo a Simón: “Navega mar adentro, y echen las redes”. Simón le respondió: “Maestro, hemos trabajado la noche entera y no hemos sacado nada, pero si tú lo dices, echaré las redes”. Así lo hicieron, y sacaron tal cantidad de peces, que las redes estaban a punto de romperse. Entonces hicieron señas a los compañeros de la otra barca para que fueran a ayudarlos. Ellos acudieron, y llenaron tanto las dos barcas, que casi se hundían. Al ver esto, Simón Pedro se echó a los pies de Jesús y le dijo: “Aléjate de mí, Señor, porque soy un pecador”. El temor se había apoderado de él y de los que lo acompañaban, por la cantidad de peces que habían recogido; y lo mismo les pasaba a Santiago y a Juan, hijos de Zebedeo, compañeros de Simón. Pero Jesús dijo a Simón: “No temas, de ahora en adelante serás pescador de hombres”. Ellos atracaron las barcas a la orilla y, abandonándolo todo, lo siguieron.
Palabra del Señor.

Comentario


El permanente desafío es trabajar en nombre de Jesús. Los proyectos pastorales, la catequesis y todas las tareas que hacemos en la Iglesia, sin Jesús, corren el riesgo de volverse puro activismo. El Espíritu Santo nos dispone para la escucha. Escuchemos lo que Jesús nos manda hacer, y hacia allí encaminemos nuestros esfuerzos. Él trabaja con nosotros, está en nuestra barca.

miércoles, 2 de septiembre de 2015

Lucas 4; 38 – 44

Al salir JESUS de la sinagoga fue a la casa de Simón. La suegra de Simón estaba con fiebre muy alta, y le rogaron por ella. JESUS se inclino hacia ella, dio una orden a la fiebre y esta desapareció. Ella se levanto al instante y se puso a atenderlos.
Al ponerse el sol, todos los que tenían enfermos de diversos males se los llevaban a JESUS y El los sanaba imponiéndoles las manos a cada uno. También salieron demonios de varias  personas; ellos gritaban: Tu eres el Hijo de DIOS, pero El los amenazaba y no les permitía decir que EL era el Mesías, porque lo sabían.
JESUS salió al amanecer y se fue a un lugar solitario. La gente lo andaba buscando, y los que pudieron dar con El le insistía para que no se fuera de su pueblo. Pero JESUS les dijo: “YO tengo que anunciar también en las otras ciudades la Buena Nueva del Reino de DIOS, porque para eso he sido enviado.”
Salió, pues, a predicar por las Sinagogas del país Judío.
Palabra del Señor.

Comentario

Jesús, el Ungido de Dios, se consagra a toda obra buena. Y hace esta tarea entrando en contacto personal, físico y cercano con las personas. Se inclina sobre la suegra de Pedro e impone las manos sobre los enfermos. Su delicadeza y su ternura en el trato con todos nos reflejan la bondad y el amor de su corazón, y nos dan confianza para acercarnos hasta él con todas nuestras cargas.