martes, 11 de octubre de 2016

Evangelio     Lc 11, 37-41

Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.
Un fariseo invitó a Jesús a cenar a su casa. Jesús entró y se sentó a la mesa. El fariseo se extrañó de que no se lavara antes de comer. Pero el Señor le dijo: “¡Así son ustedes, los fariseos! Purifican por fuera la copa y el plato, y por dentro están llenos de voracidad y perfidia. ¡Insensatos! El que hizo lo de afuera, ¿no hizo también lo de adentro? Den más bien como limosna lo que tienen y todo será puro”.
Palabra del Señor.

Comentario


La contraposición entre lo exterior y lo interior es un llamado de atención no sólo para los fariseos, sino también para nosotros. Todo el cuidado que ponemos en rituales y prácticas piadosas, ¿lo ponemos también en nuestro interior?

No hay comentarios:

Publicar un comentario