lunes, 9 de abril de 2012

Marcos 10
El ciego de Jericó
Llegaron a Jericó. Y, al salir JESUS de allí, acompañado de sus Discípulos y de una gran multitud, el hijo de Time (Bartimeo), un limosnero ciego, estaba sentado a la orilla del camino. Cuando supo que era JESUS de Nazaret, se puso a gritar: ¡JESUS hijo de David, ten compasión de mi! Varias personas trataron de hacerlo callar. Pero él gritaba mucho mas ¡Hijo de David, ten compasión de mi!
JESUS se detuvo y dijo: “llámenlo” Llamaron, pues, al ciego diciéndole: ¡Párate hombre!, te esta llamando. Y él, arrojando su manto, de un salto se puso de pie y llego a JESUS.
JESUS le pregunto: “¿Qué quieres que te haga?” El ciego respondió: Maestro que yo vea. Entonces JESUS le dijo: “Puedes irte, tu fe te ha salvado”

Hoy día, muchos estamos ciegos, hay muchas cosas que nublan nuestra vista, el dinero, la avaricia de tener mas y mas, el querer comprar cosas que no necesitamos. Todo eso nos va haciendo ciegos y olvidamos que lo único importante en la ida es DIOS y da lo que necesitamos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario