El mago Simón (Hechos 7)

Al ver Simón que mediante la imposición de manos de los Apóstoles se les transmitía el Espíritu, les ofreció dinero diciendo: Denme a mi también ese poder, de modo de que a quien yo imponga las manos reciba el Espíritu Santo.

Pedro le contesto: ¡al infierno tu y tu dinero! ¿Cómo has pensado comprar el don de DIOS con dinero? Tu no puedes esperar nada ni tomar parte de esto, porque tus pensamientos no son rectos ante DIOS. Arrepiéntete de esa maldad tuya y ruega la SEÑOR que perdones tus intenciones, ojala lo haga. Porque en tus caminos veo solo amarguras y lazos de maldad. Simón respondió: Rueguen ustedes al SEÑOR por mi, para que no venga sobre mi nada de lo que han dicho.