Lucas 4; 14 – 22

JESÚS volvió a Galilea, iba enseñando en las sinagogas y su fama se extendió por toda aquella región. Un sábado como de costumbre fue a la sinagoga y se levanto para hacer la lectura y le entregaron el rollo del profeta Isaías, lo desenrollo y comenzó a leer: “El Espíritu del SEÑOR esta en mi, porque me ha ungido para llevar a los pobres la buena nueva, para anunciar la liberación de los cautivos y la curación a los ciegos, para dar la libertad a los oprimidos y proclamar el año de gracias del SEÑOR”. Enrollo el volumen y se sentó. Entonces comenzó a hablar: “Hoy mismo, se ha cumplido este pasaje de la escritura que acaban de oír”.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.