viernes, 3 de septiembre de 2021


 

Lucas 5; 33 – 89

Los Fariseos y escribas preguntaron a JESÚS: ¿porque los Discípulos de Juan ayunan con frecuencia y  hacen oración, igual que los discípulos de los Fariseos, y los tuyos, en cambio, comen y beben?

JESÚS les contestó: “¿Acaso ustedes pueden obligar a los invitados a una boda que ayunen, mientras el esposo esta con ellos? Vendrá el día en que le quiten al esposo, y entonces ayunarán”. Les dijo también una parábola: “nadie rompe un vestido nuevo para remendar uno viejo, porque echa a perder el nuevo, y al vestido viejo no le queda el remiendo del nuevo. Nadie echa vino nuevo en odres viejos, porque el vino nuevo revientas los odres y entonces el vino se tira y los odres se echan a perder. El vino nuevo hay que echarlo en odres nuevos y así se conservan el vino y los odres. Y nadie acabando de beber un vino añejo, acepta uno nuevo, pues dice: el añejo es mejor”.

PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR, JESÚS.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario