viernes, 18 de marzo de 2016

Juan 10; 31 42

Entonces los Judíos tomaron piedras de nuevo para tirárselas. JESUS les dijo: “He hecho delante de ustedes muchas obras hermosas que procedían del PADRE, ¿por cual de ellas me quieren apedrear? ”  Los judíos respondieron: no te apedrearemos por algo hermoso que hayas hecho, sino por insultar a DIOS, porque tú, siendo hombre, te haces DIOS.
JESUS les contesto: “¿no está escrito en su ley: YO he dicho que son Dioses? No se puede cambiar la escritura, y en ese lugar llama dioses a los que recibieron la Palabra de DIOS. Y YO, que fui consagrado y enviado el mundo por el PADRE ¿estaría insultado a DIOS al decir que soy el Hijo de DIOS? Si YO no que hago las obras del PADRE, no me crean. Pero si las hago, si no me creen a mi, crean en esas obras, para que sepan y reconozcan al PADRE que está en mí, y YO en el PADRE.”
Otra vez quisieron llevarlo preso, pero JESUS se les escapo de las manos. Se marcho de nuevo al otro lado del Jordán, donde Juan bautizaba al principio y se quedó allí. Mucha gente acudió a El, y decían: Juan no hizo ninguna señal milagrosa, pero todo lo que dijo de este era verdad. Y muchos creyeron en El en aquel lugar.
Palabra del Señor.

Comentario

Jesús enfrenta y desafía a sus acusadores. Tiene muy claro la fuerza y la verdad de su mensaje y no duda de aquello de lo que está convencido. Su comunión con el Padre y su conocimiento de la Escritura lo han capacitado para estos momentos. ¿Y nosotros? ¿Buscamos conocer cada más la Escritura y a nuestro Padre y a así poder dar “razón de nuestra esperanza”?


No hay comentarios:

Publicar un comentario